Según la Convención de Ramsar, que los define por primera vez en el año 1971, los humedales son los ecosistemas de mayor biodiversidad  del mundo, con funciones y servicios fundamentales tales como diversidad biológica, regulación climática, fuentes de agua y productividad primaria de las que innumerables especies vegetales y animales dependen para subsistir.

En Argentina, existen numerosos sistemas de humedales de diferentes características, muchos de ellos amenazados por actividades antrópicas. Para protegerlos, la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación impulsa desde el año 2008 la conformación de equipos para realizar el Inventario Nacional de Humedales que sirva como base para la implementación de políticas públicas de  gestión y protección, tales como la Ley de Presupuestos Mínimos de Humedales (proyecto que se encuentra actualmente en discusión) y  el ordenamiento ambiental del territorio.

La Universidad Nacional del Litoral (UNL), a través de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas (FICH), fue convocada por el gobierno nacional para identificar, delimitar, clasificar y caracterizar humedales naturales de una región específica del país, representada en este caso por la cuenca del Arroyo Yaguarí, provincia de Corrientes. Asimismo, otras tres universidades nacionales (San Martín, Tucumán y Jujuy) trabajaron en otros proyectos pilotos en Buenos Aires y Jujuy.

“En junio de este año participamos de la reunión de coordinación de proyectos del inventario de humedales, en la cual compartimos los resultados de las experiencias demostrativas realizadas durante 2017, con el objetivo de proporcionar elementos que contribuyan a consolidar la metodología para inventariar los humedales del país y consolidar una herramienta de evaluación del recurso a nivel nacional, que sirva como instrumento de apoyo a los planes y programas de conservación y/o protección de humedales”, explicó Daniela García, docente e investigadora de la FICH que trabajó en este proyecto junto a los docentes e investigadores Leticia Rodríguez, Silvio Graciani y Emiliano Veizaga.

“Fue un trabajo de siete meses, en el cual quedaron evidenciadas distintas actividades multidisciplinarias, a diferencia de los grupos de las otras universidades, que se centraron en la cartografía e interpretación de imágenes satelitales. En el caso de la FICH, somos investigadores de diversas disciplinas que le dimos una mirada amplia al trabajo, complementando el análisis cartográfico y de imágenes satelitales con descripciones geomorfológicas, ambientales e hidrológicas, con salidas a campo y reuniones con distintos actores involucrados en el tema, desde el sector político-institucional hasta el productivo”, detalló Rodríguez.

En este equipo también colaboraron los docentes e investigadores Carlos Ramonell (FICH), Alejandro Giraudo y Vanesa Arzamendia (INALI-FHUC), en calidad de asesores, y Enrique Mihura, de la FICH, como coordinador general. También participaron los pasantes Emilia Bazán, Cristian Arguello y Melania Bressan.

Sistemas amenazados
El área de estudio del caso piloto abordado por la FICH comprendió 1.600km2 del sector sudoeste de la subcuenca del Arroyo Yaguarí, ubicada sobre parte de los departamentos Curuzú Cuatiá y Mercedes, en el centro oeste de la provincia de Corrientes.

En base a antecedentes, análisis cartográfico, imágenes satelitales y verificación a campo se identificaron humedales naturales y antrópicos, asociados principalmente a explotaciones arroceras y pecuarias, cuyos bienes y servicios más predominantes consisten en la provisión de agua para consumo de ganado y riego de arroz. “Estas actividades humanas amenazan a los sistemas naturales. Se manifiesta el avance del cultivo sobre las planicies de inundación, el uso de agroquímicos y la modificación de humedales mediante represamiento y derivación del agua. Por ello es clave trabajar en un inventario que contribuya a su gestión y protección. Nuestro trabajo es un aporte en este sentido”, comentó García.

Al respecto, Rodríguez agregó: “El estudio de humedales constituye una línea de investigación reciente en la FICH, en la que pretendemos seguir avanzando porque tenemos una fortaleza muy grande que es la multidisciplinariedad. Esto aporta una visión amplia del tema, muy enriquecedora para su abordaje integral”.